Museo de Arte Lorenzo Padilla Díaz
El Museo de Arte atesora significativas colecciones de objetos de arte que le han permitido acometer la misión de rescate, salvaguarda, investigación, exposición y conservación de los bienes patrimoniales.
Sus fondos se conforman por más de 2000 piezas, entre pinturas, dibujos, grabados, carteles, esculturas, fotografías, objetos decorativos, muebles y arte tradicional africano; adquiridas mediante transferencias del Museo Provincial Palacio de Junco y del Registro Provincial de Bienes Culturales, por compras realizadas a personalidades, artistas, y por el concepto de donación. Es de destacar, la labor coleccionista del artista Lorenzo Padilla Díaz (Matanzas, 1931), quien ha preferido acopiar obras de arte no en función de fundar un patrimonio familiar e individual, sino destinadas a crear fondos para una institución estatal con la finalidad de fomentar el disfrute colectivo para una comunidad, una ciudad y, por supuesto para una nación. Tal sensibilidad ante el arte, le llega a este hombre de su formación como artista, graduado en 1957 de profesor de Dibujo y Pintura en la Escuela Provincial de Artes Plásticas de Matanzas. Dos años después en 1959, continúa profundizando sus conocimientos sobre el arte universal en una beca que obtiene en el Museo del Prado, Madrid; luego, desde España viaja a París donde se queda deslumbrado por el ambiente creativo de Montmartre y se establece, desde 1961 hasta la fecha. Su fascinación ante las principales obras que han marcado hito en la historia del arte de todos los tiempos, le incentiva aunar piezas para la creación de un Museo de Arte en Matanzas, posibilitando al público de su ciudad natal el contacto visual con los grandes maestros de la historia del arte y con una cultura tan cercana a la nuestra, como la de los pueblos africanos.
La casona donde se establece el Museo, data del Siglo XIX, es el reflejo de un estilo ecléctico muy diseminado y acentuado en la arquitectura doméstica matancera. Su primer propietario fue el Lic. Carlos Ortiz Hernández (1820-1889),abogado de origen bayamés que fungía como asesor titular de los Juzgados de Artillería e Ingeniería de la ciudad; luego fue heredada por sus descendientes. Dentro de la historia de esta vivienda, se destaca que cumplió función diplomática en 1895, cuando se establece el Consulado de los Estados Unidos de Norteamérica, representado por el Sr. A.C.Brice, conjuntamente con el gabinete-vivienda del Dr. Coffigny. No se conoce porque fue escogido este lugar para estos desempeños y la repercusión que alcanza. En 1949, la propiedad de esta vivienda se transfiere por herencia testificada a la esposa de Julio Ortiz, María Teresa Pérez Córdoba y sus descendientes. La historia de esta residencia tiene en la familia SánchezJunco, sus penúltimos propietarios. En junio de 1950 Concepción Junco Bruzón (1895-1971), adquiere en acto de compra el inmueble a los hermanos Ortiz-Pérez. El esposo de Concepción, Eduardo Miguel Sánchez de la Nuez, convierte a Contreras No. 36, por segunda vez, en otra sede diplomática. Es nombrado ViceCónsul de Dinamarca y a su efecto es reconocido como tal. A partir de junio 1986, figura como única propietaria, una de las hijas del matrimonio Sánchez-Junco, María de la Concepción, pues su otra hermana se había radicado desde 1967 en Costa Rica. En los inicios de la década del noventa, salió a residir permanentemente en el exterior.
La huella de estas familias y su historia continúa con la fundación del Museo de Arte de Matanzas, en 1998, el cual se mantiene ofreciendo servicios a la comunidad hasta la fecha.
El museo cuenta con 2 salas transitorias y 2 salas permanentes, la Sala I. Arte Internacional y Cubano (Siglo XVI-XX), y sala II. Arte Tradicional Africano, que presenta 2 secciones.
Horario:
De martes a sábado de 9:00 am a 4.30 pm
Domingo de 9:00 am a 12: 00 pm